Cuando se trata de empaquetar para vaciar tu piso, hay muchas cosas que considerar. Primero, es importante tener un plan de acción. Yo recomiendo hacer una lista con todas las cosas que necesitas empaquetar y organizarlos por prioridades: primero los artículos más urgentes como documentos vitales, luego aquellos elementos más delicados que necesitan mayor cuidado (platos, vasos, etc.). También hay que asignar suficiente tiempo para empacar; no es algo que se deba hacer apresuradamente.
Además, sería bueno pensar en la forma en la que quieres organizar los elementos en cajones o bolsas antes de arrancar el proceso de empaque. Por ejemplo, si tienes muchas prendas de ropa limpias y usadas puedes separarlas en dos contenedores distintos para facilitarte el trabajo a la hora de desempacarlas nuevamente. Esto te evitará tener que mezclarlas innecesariamente durante el desempaque.
Ahora sí... ¡manos a la obra! Lo primero que debes hacer es recoger todos los materiales necesarios para el embalaje como cajas o bolsas resistentes; cinta adhesiva; etiquetador; plástico transparente y papel burbuja (para proteger objetos frágiles). Si te encuentras sin estrictamente necesario para embalar alguno de sus objetos, ¡no te desanimes! Siempre pueden usarse prendas de vestir como camisetas o forros interiores como material alternativo para cubrir y proteger lo mas preciado.
Por último pero no menos importante: no olvides etiquetar cada contenedor con un marcador permanente (idealmente), indicando claramente qué tipo de objetos hay dentro del mismo así como su destino final -¡esto hará muchísima diferencia al momento del desempacke! Sigue ests simples pasos y podrás vaciar tu piso exitósamente sin demasiado stress ni complicaciones.(¡Yupii!)